Este es probablemente el postre más fácil del mundo, solo tiene 2 ingredientes importantes y por eso es imprescindible que sean de buena calidad: chocolate y huevos.
Esta receta la aprendi en el FCI, en donde aprendí, no a cocinar, por que eso ya sabia, pero a cocinar a la francesa, algo a lo que me resistí los primeros casi 30 años de mi vida.
Siempre quise ir a la escuela de cocina, pero como una cosa más de las mil y una cosas que me hubiese gustado hacer, finalmente tuve la oportunidad de hacerlo y llego el momento de escoger la escuela. Yo quería ir a una escuela en donde se explorasen las técnicas e ingredientes asiáticos, que es lo que más me gusta, hasta ese momento yo ni siquiera usaba un cuchillo sino un machete (aka cleaver), con el que picaba, cortaba el pollo, picaba el kion, pelaba la fruta, etc etc, la cocina francesa me parecía un poco sosa 🙂 , por decir algo.
Bueno, terminé escogiendo a regañadientes el French Culinary Institute en pleno SOHO, en la esquina de broadway y grand, la verdad es que pocas cosas me han hecho más feliz.
Descubrí la increible cocina francesa y hasta me puse el sombrerito y el pañuelito por los 2 años que estuve allí.
De todas maneras sigo usando mi machete, menos, pero si :).
Regresando a los ingredientes:
El chocolate, tiene que ser de buena calidad, sin leche y de no menos de 55% . Cuanto mas alto el porcentaje, el chocolate es menos dulce, o mas amargo. Es decir un chocolate de 70% es menos dulce que uno de 55%.
Los huevos, tienen que ser frescos, de preferencia de corral y de tamaño normal. Los van a comer crudos osea que es importante que sepan de donde vienen.
Esta es una de las tantas recetas francesas que aprendí en el FCI ahora llamado ICC.
Mousse de chocolate
– 200 gr de chocolate bitter (usé uno al 55% de Amazona Chocolate)
– 3 cucharadas de agua (puedes agregar 1 o 2 cucharadas de algún licor o reemplazar el agua con café)
– 4 huevos a temperatura ambiente
– una pizca de sal
Coloca el chocolate picado junto con el agua en un recipiente resistente al calor. Pon el recipiente sobre una olla con agua caliente, la olla debe ser mas pequeña que el recipiente, el agua no debe tocar el recipiente en el que está el chocolate. Lleva todo a fuego bajo y mueve hasta que el chocolate este derretido.
Coloca el recipiente con el chocolate sobre un secador y espera a que enfrie ligeramente.
Mientras tanto separa los huevos. Coloca las claras en un recipiente y las yemas en otro.
Bate las yemas ligeramente con un tenedor y cuélalas. Agrégalas, en forma de hilo y moviendo constantemente, al chocolate derretido y mezcla bien. (colamos las yemas para que no queden pedacitos de clara que no se mezclen bien con el chocolate que estará más caliente que tibio)
Agrega una pizca de sal a las claras y bátelas a punto de nieve, tienen que estar brillosas y firmes. Recuerda que no puede caer nada de yema a las claras, el recipiente debe estar muy limpio y el batidor también. Un poquito de grasa y las claras no levantan.
Ahora si la mezcla de chocolate estará tibia, mezcla la mitad de las claras con el chocolate usando una espátula y con movimientos envolventes. Cuando esten bien mezcladas agrega la otra mitad y haz lo mismo. No batas la mezcla con fuerza, sino incorpora las claras con suavidad para que el mousse salga esponjoso.
Pon el mousse en copitas, vasitos, tacitas o en un recipiente grande para después servir por cucharadas.
Refrigera por lo menos por 3 horas antes de servir. Sirve solo o con frutas frescas, deli con fresas o arándanos de InkaOrganics.
¿Cuántas porciones salen? 1, 2, 3, 4… de hecho no más de 6 🙂